Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

miércoles, 24 de junio de 2015

Inmortal

Inmortal

Como la vieja campana en lo más alto de la ciudad, como el alba en un frio amanecer de invierno, solo y quieto, viviendo sin pensar, con el cuerpo inerte y el rostro indiferente, mido mi tiempo con las estrellas, mis noches son la luna y mi despertador el sol, condenando al futuro por un pasado plateado y un presente oscuro, no dejaré el reflejo de ninguna sombra en mi frente, seré el silencio de esa llama que todo asola, creo en las utopías y sueño con fantasías que te alejan de tu lugar, el reflejo de mi imagen apacible y dura sobre las nubes, abrí el cofre de mis malas memorias y tristes historias, las dejé volar, vacié mis bolsillos de recuerdos inservibles, camino al costado del roto mármol de una sepultura que lleva mi nombre, la miro y sonrío, tendrás que esperar mucho para estar conmigo, guardo cada una de las burbujas llenas de buenas vivencias en mi corazón, hoy más que nunca me siento vivo, las flores me envidian cuando se marchitan, el aire es inmortal y la roca eterna, corazón gitano y alma libre, vivo desnudo y camino a la deriva, oigo el canto de la lluvia y siento la mirada de la hierba, nado en la arena y vuelo en el mar, dormiré en las ramas de un viejo árbol y seré libre sin excusas.