Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

martes, 22 de marzo de 2016

Mi cielo

Mi cielo

Tiempo galopante que se queda sin pies en tu ausencia, tiempo eterno viviendo en la distancia, tiempo lerdo y lento, tiempo fugaz en cada uno de nuestros momentos, momentos que alimentan esperanzas, ratos que están llenos de convencimiento y crecimiento, tiempo que juntos puede ser tan raudo como la vida de una mariposa y separados longevo como la edad de un elefante.

Capullos que florecen con la luz del alba, aves que regresan a su nido solitarias al atardecer, aventureros descubriendo nuevos mares, turistas en el tiempo, un cigarro, balcón bajo la luna y a lo lejos tú, timidez rompiendo cadenas, no importa el lecho si es de los dos, acostados sobre el mar, mar turquesa y arena blanca, madrugadas interminables.

Vasos que chocan con copas, vino y whisky que se entrelazan en un beso, mensajes ocultos en cada uno de tus rincones, travesuras en cada uno de tus lugares, mimos en cada centímetro de tu cuerpo, materia que ya dejó de ser nuestra, cuerpos adueñados de nuestra razón, sin perjuicios, sin temores, sin religión, llenando pasaportes, dibujando historias en sus hojas.

Aves plateadas que nos llevan en sus entrañas, alucinantes viajes de ida y tediosos periplos de regreso, antes del final planes de recomenzar, difícil volverse a nivelar después de volar tan alto, enfrentando al viento sin importar el tiempo, dejarnos raptar, atarte a esta pasión no dejándote mirar, tan solo tú dejándote llevar, nuevos sabores, nuevas sensaciones desenfrenadas, pasiones sobre el sillón de la sala.

Se silencia el cielo, se calla el universo, tan solo el canto de nuestra respiración conjugada en todos los verbos, buscadora de tesoros ocultos bajo la atenta mirada de una mascota de peluche, vigilante corazón sobre tu ventana oteando cada uno de tus sueños y pesadillas.