Hojas en llamas
Tan solo pido lo que doy, no confío ni en mi sombra , pero le regalo mi vida a una alondra, contradicción, no podría ser ateo si hay alguien en quien yo creo, escaleras que nunca aprendí a subir, princesa convertida en reina , sin echar raíces, para llegar a estar enamorado saco cuentos de lo sufrido, la ilusión es el peor suicido, no creo en sembrar lo bueno para cosechar mejor, creo en ser tú y dar, desempolvando disfraces, haciendo lugar en los cajones, barajar y dar de nuevo, esperar que la semilla se haga una planta real, cuerdo sin sentido, coherente locura, diciendo demás y haciendo de menos, sin miedo a vivir, abrigado bajo un libro, rompiendo cadenas sin tener conciencia, injusticias y deslealtad en el cielo, justicia y lealtad en el infierno, ser tu pesadilla más dulce y tu más amargo sueño, juzgando al por mayor y dando al por menor, adicto a la nicotina, sin confundir la soberbia con la autoestima, a mí no me enjuician mis padres, los principios inculcados, mis valores obligados, ni una religión, mi juez soy yo, buscando la victoria no me importa ser un perdedor, llega la hora de pagar pero también de cobrar, preso en mi poesía absurda, hojas en llamas, trazos humeantes.
lunes, 26 de octubre de 2015
jueves, 22 de octubre de 2015
Mi tiempo
Mi tiempo
A veces un huracán, filos de silencio, suspiros de ombligos, indescifrable rompecabezas, encallando barcos, noches de subastas, ecos de mar, muy grande el orgullo y muy chica la razón, mundo de tuertos, la cobardía no existe en mi diccionario, disparando a mansalva, lava de sangre, pidiendo dos donde hay uno, soñar con dos cuando son tres, siempre protagonista, espejos rotos, no me ahogo en mares ajenos, se nadar, infiel de camas, honesto con mis convicciones y principios, con tiempo propio y tiempo extraño, pegando media vuelta y volviendo a empezar.
Pateando piedras, dejándolas atrás, te doy mi tiempo a cambio de tus segundos, bailemos a la sombra de los tic tac, tal vez para darte tengo poco pero es todo lo que soy, no me guardo nada, todo es tuyo, no tiene precio lo que me das, te quiero clara y brillante como el sol de la mañana sin desconfianzas ni dudas, las flores de tu pelo se las llevo el viento, fuimos agua en el desierto, lo efímero para otros son sueños, realidad de otros para mí una fantasía, el equivocarse no es fatal, no perder puede de ser un empate de a dos, un tango en par, veo mis libros escritos y publicados, no tengo más que agradecerte tu protagonismo, soy un ateo en el amor, pendiente da cada defecto, exigencia de a dos.
A veces un huracán, filos de silencio, suspiros de ombligos, indescifrable rompecabezas, encallando barcos, noches de subastas, ecos de mar, muy grande el orgullo y muy chica la razón, mundo de tuertos, la cobardía no existe en mi diccionario, disparando a mansalva, lava de sangre, pidiendo dos donde hay uno, soñar con dos cuando son tres, siempre protagonista, espejos rotos, no me ahogo en mares ajenos, se nadar, infiel de camas, honesto con mis convicciones y principios, con tiempo propio y tiempo extraño, pegando media vuelta y volviendo a empezar.
Pateando piedras, dejándolas atrás, te doy mi tiempo a cambio de tus segundos, bailemos a la sombra de los tic tac, tal vez para darte tengo poco pero es todo lo que soy, no me guardo nada, todo es tuyo, no tiene precio lo que me das, te quiero clara y brillante como el sol de la mañana sin desconfianzas ni dudas, las flores de tu pelo se las llevo el viento, fuimos agua en el desierto, lo efímero para otros son sueños, realidad de otros para mí una fantasía, el equivocarse no es fatal, no perder puede de ser un empate de a dos, un tango en par, veo mis libros escritos y publicados, no tengo más que agradecerte tu protagonismo, soy un ateo en el amor, pendiente da cada defecto, exigencia de a dos.
sábado, 10 de octubre de 2015
12 de octubre
12 de Octubre
Cielo azul, mar turquesa, el camino y la llegada, carabelas cargadas de decadencia y teñidas de muerte, con hambre de oro y plata, sedientos de fama y gloria, almas negras y corazones de piratas, carroñeros sin alma, saqueadores sin conciencia, pisaron nuestras costas en nombre de la corona, con fuego y acero en las manos, destruyendo creencias y religiones, la ley del más fuerte.
Se hacían llamar civilizados, bestias desconocidas hacían noche de nuestros días, la libertad convertida en azotes, nuestro paraíso ensangrentado, nuestro hogar ultrajado, destruyendo la cultura, espadas y balas manchadas de la sangre nuestra, sembradíos convertidos en establos.
Un nuevo Dios había llegado, se perdió la libertad de lo pagano, tuvimos que adorar dos palos cruzados, nos cambiaron la libertad por una biblia, verbena de abuso y saqueo, de ser libres pasamos a ser esclavos, estafadores con cuentas de vidrio, la libertad de nuestros cuerpos emplumados se convirtió en servidumbre, nos robaron nuestra alma, no quitaron nuestra esencia, ríos de sangre, lluvia de acero.
Nos descubrieron, nos conquistaron, convertidos en foráneos de nuestra tierra, sirvientes de la codicia, descendencia bastarda fue lo que nos dejaron, esperanza y sueños perdidos, nuestra plata, nuestro oro y nuestros trigo llenaron sus bolsillos, nuestros templos en ruinas, traición y desolación, descendencia contaminada por el resto de nuestras vidas, nos sacaron el horizonte y el mar, profecía de sangre y dolor.
Incas, Mayas, Aztecas, Guaraníes, Mapuches, Charrúas, Tupíes, Taínos, Caribes y Arawacos quedamos en la historia como pre-colombinos, el final había llegado, yo no soy hispano, soy y seré siempre Americano, hoy es un día para honrar la memoria de mis indígenas hermanos, hoy no es un día para festejar.
j.e.h.l.
Cielo azul, mar turquesa, el camino y la llegada, carabelas cargadas de decadencia y teñidas de muerte, con hambre de oro y plata, sedientos de fama y gloria, almas negras y corazones de piratas, carroñeros sin alma, saqueadores sin conciencia, pisaron nuestras costas en nombre de la corona, con fuego y acero en las manos, destruyendo creencias y religiones, la ley del más fuerte.
Se hacían llamar civilizados, bestias desconocidas hacían noche de nuestros días, la libertad convertida en azotes, nuestro paraíso ensangrentado, nuestro hogar ultrajado, destruyendo la cultura, espadas y balas manchadas de la sangre nuestra, sembradíos convertidos en establos.
Un nuevo Dios había llegado, se perdió la libertad de lo pagano, tuvimos que adorar dos palos cruzados, nos cambiaron la libertad por una biblia, verbena de abuso y saqueo, de ser libres pasamos a ser esclavos, estafadores con cuentas de vidrio, la libertad de nuestros cuerpos emplumados se convirtió en servidumbre, nos robaron nuestra alma, no quitaron nuestra esencia, ríos de sangre, lluvia de acero.
Nos descubrieron, nos conquistaron, convertidos en foráneos de nuestra tierra, sirvientes de la codicia, descendencia bastarda fue lo que nos dejaron, esperanza y sueños perdidos, nuestra plata, nuestro oro y nuestros trigo llenaron sus bolsillos, nuestros templos en ruinas, traición y desolación, descendencia contaminada por el resto de nuestras vidas, nos sacaron el horizonte y el mar, profecía de sangre y dolor.
Incas, Mayas, Aztecas, Guaraníes, Mapuches, Charrúas, Tupíes, Taínos, Caribes y Arawacos quedamos en la historia como pre-colombinos, el final había llegado, yo no soy hispano, soy y seré siempre Americano, hoy es un día para honrar la memoria de mis indígenas hermanos, hoy no es un día para festejar.
j.e.h.l.
miércoles, 7 de octubre de 2015
Sin mirar atrás
Sin mirar atrás
Azúcar y sal, cierro los ojos y solo veo el sol, rebusco en mis bolsillos y solo encuentro migajas, reviso mis zapatos y solo encuentro borrosas huellas, hiel y miel, existo en mi silencio, por querer correr me perdí de caminar, por querer caminar me olvidé de volar, por querer volar me dejé atrás, me conformo con vivir mirando desde el umbral, respirando profundo, respiros convertidos en suspiros de soledad y paz, tributo con un minuto de silencio, cruzando la vida venerando la noche, juego con ángeles y me codeo con demonios, despierto entre canciones, existo entre estrellas, vivo entre los fantasmas de la gente, muero entre los mejores recuerdos de mi mente, mi coherencia absurda me lleva a todos los lugares, Incoloros bosques y playas en blanco y negro, acordeón sin viento, ciego, sin mirar donde quedaron los sueños, juntando heridas, siempre dejando atrás todo lo que restó, vivo sumando en cada amanecer para siempre caer en los brazos del alba.
Azúcar y sal, cierro los ojos y solo veo el sol, rebusco en mis bolsillos y solo encuentro migajas, reviso mis zapatos y solo encuentro borrosas huellas, hiel y miel, existo en mi silencio, por querer correr me perdí de caminar, por querer caminar me olvidé de volar, por querer volar me dejé atrás, me conformo con vivir mirando desde el umbral, respirando profundo, respiros convertidos en suspiros de soledad y paz, tributo con un minuto de silencio, cruzando la vida venerando la noche, juego con ángeles y me codeo con demonios, despierto entre canciones, existo entre estrellas, vivo entre los fantasmas de la gente, muero entre los mejores recuerdos de mi mente, mi coherencia absurda me lleva a todos los lugares, Incoloros bosques y playas en blanco y negro, acordeón sin viento, ciego, sin mirar donde quedaron los sueños, juntando heridas, siempre dejando atrás todo lo que restó, vivo sumando en cada amanecer para siempre caer en los brazos del alba.
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