Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

domingo, 30 de mayo de 2021

 

NO

 La gota de un buen recuerdo no debe borrar un océano de malos momentos, una noche estrellada no puede desvanecer las memorias de cielos nublados, la belleza del otoño no puede ocultar la frialdad del invierno, un grano de arena en el desierto, pompas de jabón volando entre espinas, una brisa fresca no hará esfumar de mi mente tantos huracanes, una hermosa nota musical no debe enmudecer la triste melodía de una canción, lo aburrido de las rutinas no se puede esconder, sueños abandonados en un rincón, no se puede vivir muriendo.

La agonía de una ilusión, una fantasía irreal, una quimera sin principio ni final, un cuento en singular nunca se convertirá en una historia en plural, es muy difícil volar sin alas y andar sin pies, no se puede llegar sin camino, hay huellas marcadas en la arena que es mejor que sean borradas con las caricias de una ola, tomando atajos para subsistir, heridas de batallas sin sentido, incendios que arrasaron todo, un calendario pintado de fracasos, almohadas que dejaron de jugar.

 Hay recuerdos que son mejor abandonar, tela de araña que se convierte en trampa, mente traicionera que juega con destellos de felicidad, ardid mental, negando la cuenta regresiva, es justo querer llegar al cero con paz y tranquilidad, el brillo de un arco iris no puede ocultar la sequedad de una cascada muerta, frágiles cristales que alimentan el alma no deben ocultar la fría escarcha, no se puede ir siempre contra corriente queriendo lograr y conquistar sueños cuando la monotonía se convirtió en religión.

 Añoranzas de nuestra juventud recordando el pasado olvidamos que también existe el tiempo que no permite que todo sea igual, malos recuerdos disfrazados que quieren atrapar, no hay que dejarse estafar mirando atrás, recordar no es perder, volver atrás sería naufragar, despojarme de los buenos ratos, desnudarme de mi vulnerabilidad, arrancarme la piel curtida de espejismos y dejar atrás el ayer, bella enredadera que te abraza sin mostrar su cruda verdad.

 Las raíces de la esperanza resecas no volverán a florecer, corriente fresca de agua que te arrastra y hunde, el delirio de querer un bosque y tan solo encontrar un desierto mendigo de oasis, cuando las canciones ya no dicen nada, indigencia de dedicación y opulencia de austeridad, sin dejarme engañar, sin mirar atrás, levantar una copa y brindar, para que los días vuelvan a llegar, para que se vuelvan a llenar de color con olor a lluvia.