Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

martes, 22 de mayo de 2012

Noches eternas


Noches eternas

Horas interminables, momentos eternos, segundos que pesan como la más grande de las rocas, tiempo imparable que a cada uno de sus pasos solo me hacen sentir la ausencia de ti, el día camina con la monotonía y siempre acompañado de multitudes cerradas en sus mundos pero compartiendo el espacio y tiempo, la noche llega sola, tal vez abrigado bajo la luz de un pucho, tal vez con un vaso de licor sentado en al balcón mirando la inmensidad de la cuidad cuando duerme.

Momentos silentes, engañándonos que no tienen tiempo, paréntesis de la vida para poder estar conmigo mismo, tal vez divagando, tal vez volando o tal vez como nunca con los pies en la tierra, me gusta estar conmigo pero desearía estar contigo en la inmensidad de la noche, en la grandeza de la luna, sin tiempo, sin momentos, sin sexo, solo siendo lo que somos en las penumbras de la de su luz, con nuestras almas denudas en un beso de copas, con miradas honestas, siendo quienes somos.

Caminatas tardías en la madrugada con el pretexto de no pensar en nada, momentos que se llenan mas de ti que nunca, noche, temible amiga que desnuda lo que llevo adentro, compañera inseparable que está a mi lado, cómplice de pensamientos y sueños, recuerdos de sabanas mojadas y noches solitarias, me dibujas en tu terciopelo negro como nada en la vida lo hace, tu manto negro me cubre y me siento abrigado a pesar de la soledad de ser acompañado solo por el viento.

Prefiero vivir de noche por que la noche me deja ser yo, veo todo más claro, la madrugada con su frio abrigador aclara mi mente para todo lo que se viene, oscuridad que ilumina, garúa que refresca, caricias frías que aclaran la mente y te llevan a lo que eres sin importar si gusta a alguien o no, eres tú, en esencia y alma, noche mujer mía, amante de mi soledad, compañera de mis momentos más íntimos, camarada y colega de mi esencia unida ti cómplice de mi existir.