Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

jueves, 29 de enero de 2015

Simplemente diferentes

Simplemente diferentes

El odio en cada una de nuestras discusiones y hundirnos en ese amor inmenso, el salir de mi arroyo para poder navegar en tu rio, no quiero ser tu abrigo, quiero ser y existir como parte de tu frio, incansable errante de la noche y tu queriendo descansar para aprovechar el día, te dibujo mil señales e insistes en extraviar el camino, necesito el desenfado de tus caderas y tú las caricias de mis labios, prefiero vivir en paz conmigo pero en guerra con tu cuerpo, a ti te gusta la paz de las sábanas y la guerra cada noche, amigo de tu cuerpo, confidente de tus deseos y cómplice de tu entrega.

Heridas de sangre seca, cicatrices viejas, marcas que tan solo nosotros permitimos que existan, cierra la puerta, que no entre nadie, el claustro perfecto de nuestros cuerpos, sientes que le debes a la vida, todavía con cuentas pendientes y hasta con miedo a la muerte, sé que el día que me vaya me iré con alguna cosa pendiente, jamás por no haberlas hecho en su momento, tan solo por la falta de tiempo, cuando llegue será de sorpresa pero mi vida y mi alma estarán preparadas, tengo la paciencia infinita para recorrer cada uno de tus poros, cada curva de tus caminos sin dejar ni una coordenada de tu mapa sin ser descubierta y tú con la prisa de la inexistencia de un reloj sobre tu mesa.

Recuerdo cada mirada, cada caricia, cada gemido, recuerdo cada gota de tu sudor, cada uno de los temblores de tu cuerpo, cada pecado sin penitencia, pero olvido la fechas, los nombres y hasta me pierdo en el camino, tu recuerdas lo correcto, lo perfecto, recuerdas cada detalle y cada playa, pero te olvidas de lo entregado y lo vivido, me alimento del carnaval, del ruido de la calle, tú con la quietud y el silencio de un cine, me gusta lo informal de un desayuno dejando que el café se enfríe, tú la formalidad una cena acompañada por velas, no hay hora ni ningún detalle cuando nos dejamos llevar hasta que nuestra pasión estalle.

Prefieres caminar por cada sendero y camino, yo volar por sobre todas las cosas, somos como el agua y la sed, la luz y la sombra, como la llegada y la partida, como el llanto y la risa, somos como el futuro y la historia, como el remedio y el veneno, somos como el principio y el final, la calma y la tempestad, la paz y la guerra, yo te amo con el dolor de tu ausencia y tú me odias con el placer de mi presencia, yo voy por lo que quiero y tu tan solo esperas por ello, ti te gusta el blanco y a mí me gusta el negro, yo prefiero la nieve y tu prefieres la playa, tu adoras los gatos y yo adoro los perros, yo riego las espinas y tú te preocupas por una flor perfecta, tu tomas vino y yo tomo whisky, yo anhelo el invierno y tu anhelas el verano, tú me propones el calor y yo te propongo la brisa, soy amante de la luna y tu infiel con del sol.

Dicen que somos como el agua y el aceite, una comunión imperfecta, una unión dispareja, somos las contradicciones exactas, yo prefiero la práctica y tú la teoría, a mí me gusta lo absurdo y a ti la ciencia, somos perfectamente imperfectos, por el que dirán y apariencias estúpidas que desaparecen detrás de la puerta, vivo con total entrega y desenfreno, piensas y mides el costo de lo vivido antes de vivirlo, cerremos los ojos tomados de las manos, volemos lejos sin saber a dónde llegamos.