Garabatos en solitario

Garabatos en solitario

lunes, 31 de octubre de 2022

Dejar ir

 

Dejar ir

Sol bohemio abrazando las nubes al atardecer, entonando esa melodía que tan solo dice que tu vida es plena, luna juguetona que se esconde y asoma tímidamente entre nubes de plata acompañada por traviesas estrellas que tan solo la contemplan desde lejos.

Poder ver tus huellas en la arena mojada que por las olas engalanadas de blanca espuma son borradas, marcas en la arena que nunca olvidarás, que quedan en el alma y los recuerdos, tan solo haciéndote notar que cada paso dado, cada camino recorrido, cada sendero andado fue el correcto, aunque en su momento se hayan disfrazado de errores y fracasos, de éxitos y triunfos, ya no existen, nunca fueron equivocaciones ni aciertos, tan solo fueron líneas que se escribieron con tinta indeleble en ese cuaderno que se llama experiencia y sabiduría.

La libertad de los pájaros surcando el cielo, desplegando toda su belleza con admiración a toda su grandeza, respirando profundo y llenándose del aire más puro, el verde que alimenta el alma, hierba que se abraza con la espalda, contemplando el cielo, cerrando los ojos para sentir el aroma a hierba mojada por la lluvia.

Viento refrescante que revienta en el pecho, aire que acaricia el alma, acariciando la cara de la forma más tierna y dulce, brisa helada de invierno, lleno de primeras veces que se convirtieron en últimas, plagado de postreras experiencias que se volvieron casi eternas, aprender a dejar de lado lo que no sirve para alimentarse tan solo de lo que vale la pena, cambio de rumbos, tal vez dolorosos y que al final fueron la más correcta de las elecciones, soltar y dejar ir, tan solo para creer y crecer.